AGP Y EL PALACIO DE LA DESIDIA

Quizás sea muy generoso llamar «desidia», lo que se ha hecho con los fondos de la Administración General de Puertos, durante la gestión de José Beni – fue nombrado en mayo del 2020 – durante los cuatro años del gobierno que tuvo al massismo al frente del Ministerio de Transporte de la Nación. Hasta el día de hoy, Beni sigue siendo personal de planta de la AGP.

Este es el histórico edificio de la Administración General de Puertos el que ocupó hasta el mes de Septiembre/octubre del año 2022. Ubicado en la Avenida Huergo 431, frente al otro histórico edificio de la Aduana. Se pretende convertirlo en un «Museo de las actividades portuarias» o en el «Museo del Puerto de Buenos Aires», daba lo mismo total era el pretexto para trasladarse a un lugar mas «potente y coqueto».

En octubre del año 2022, la AGP, a cargo de Beni y secundado por un bajo perfil (pero de mucho poder de decisión en temas económicos y financieros) de nombre Diego Salom actual Director de la Dirección de Planificación Estratégica (dirigente del gremio del personal jerárquico por ese entonces), nombrado por Resolución 71/AGPSE/2023, juntos encararon la sacrificada tarea de buscar un nuevo espacio físico para la Sociedad de Estado.

Beni decidió alquilar, en octubre de 2022 Expediente-2022-89636454, el primer y segundo piso del edificio Buenos Aires Plaza, ubicado en el coqueto barrio de Puerto Madero, mas precisamente en Manuela Saenz al 323 esquina Juana Manzo, frente al internacional Hotel Hilton.

Por el alquiler mensual de ese edificio se pagaba la módica suma de U$S 89.433,20, y lo decimos en tiempo pasado, porque la propiedad alquilada traía incorporado un SUM de 400 metros cuadrados de uso exclusivo, que con la ocupación se dieron cuenta que era compartido.

El interior del edificio «Buenos Aires Plaza» cede de la AGP

En julio de 2023, es decir, nueve meses después por Expediente-2023-35656836, se hizo la gestión ante locatario, y pudieron descontarse U$S 9.200 del alquiler mensual. Nada se dice de que sucedió con los importes abonados de mas, las comisiones, y los sellados abonados por el alquiler original – si fueron devueltos o no.

En definitiva, hasta el día de hoy, se abonan mensualmente U$S 80.233,20 en concepto de alquiler de esos dos pisos para la administración, que tenia su edificio en Huergo, y que dio déficit en sus últimos ejercicios, a pesar de haber recibido, del gobierno central, un negocio fabuloso como es la administración de la hidrovia.

¿Como? Si. En febrero de 2023, el entonces Ministro de Economía, Sergio Massa, autorizó, por Resolución N°  95/2023, «con el Resultado Económico establecido en el artículo 3º de esta resolución, estimase el Resultado Financiero (Déficit) para el ejercicio 2023, en la suma de nueve mil cuatrocientos siete millones quinientos veintiséis mil ciento cincuenta y siete pesos ($ 9.407.526.157)».

¿Cómo podía dar déficit una empresa que era netamente recaudadora? Recaudaba por las concesiones de las termínales portuarias, recaudaba por el uso de tierras en su jurisdicción, recaudaba por las toneladas movidas, recaudaba por el peaje de los buques que navegan por la vía navegable troncal Paraná -Paraguay, en fin recaudaba … recaudaba… y seguía recaudando.

José Beni

La decisión de Massa se fundamentó principalmente en «el Plan de Acción y Presupuesto para el ejercicio 2023 formulado por Administración General de Puertos Sociedad del Estado, ente del Sector Público Nacional actuante en la órbita del Ministerio de Transporte«.

No hay que ser economista para darse cuenta que, de esos casi 9.5 mil millones de pesos, hubo mas de 1.161 millones que se fueron por la ventanilla de una inmobiliaria. No se gasto en obras portuarias, ni en la reparación del edificio histórico, se dilapidaron, sin ninguna necesidad, mas de mil cien millones de pesos (al dólar oficial) en un alquiler innecesario y ostentoso, solo para que personas como Beni o Salom pudieran codearse con la elite que habita Puerto Madero.

Como nota de color, se supo que en su cargo como dirigente sindical, al que renuncio sobre fines del 2022, Diego Salom, solía atender al frente del edificio arrendado por la AGP, es decir en el Hotel Hilton.

Todo esto no hubiera sido posible sin el acompañamiento de otros funcionarios como por el ejemplo Verónica Piñero, que ingresada en 2020 como Asesora, en el 2022 era Gerente de Compras y en una carrera maratónica de apenas 3 años se convirtió en 2023 en la Gerente General de la Sociedad de Estado (Resolución 2023-44-APN-AGP-MTR).

Tampoco podemos excluir de este «acompañamiento» a Tomas Hogan, que sin ningún antecedente serio en temas portuarios, fue designado como Subinterventor hasta enero del 2023, que fue reemplazado por Tomas Vernet. Hogan se fue como Subsecretario de Puertos y Vías Navegables de la Nación.

En la cabecera de la mesa Diego Salom

Vale resaltar que todos ellos siguen siendo empleados de la Administración General de Puertos, formando parte de su planta Permanente, a los que habría que agregarles otros personajes como el Gerente de Planificación y Control de Gestión, Esteban Pintos, un sobreviviente de la gestión de María Eugenia Vidal en la Provincia de Buenos Aires, o el Jefe de Asesores de la Intervención, Mario Goycochea, que fuera presidente del Consorcio de Gestión de Puerto Quequén.

Para finalizar con esta desgestión de Beni, Salom y compañía no se puede dejar de soslayar que en las últimas semanas el actual interventor, Gastón Alejo Benvenuto despidió a casi cincuenta trabajadores de la AGP, pero a ninguno de ellos. Todos los despedidos, son personal de planta con ente 15 y 40 años de antigüedad en la empresa. Por último vale recordar las palabras del Diputado Nacional Leandro Santoro que dijo «La impunidad y la soberbia son un combo peligroso«, en este caso también podría decirse «redituable«.

Por Fabian Dichesare – para Informemaritimo.com

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