El canciller de Paraguay, Rubén Ramírez Lezcano, comunicó, este miércoles, al Congreso en Asunción que el gobierno paraguayo no se opone a que las barcazas que transitan por la Hidrovía del Paraná paguen un peaje, siempre y cuando haya servicios correspondientes a cambio.
Asimismo exige que se anulen las facturas impagas de las navieras. Las facturas venían acumulándose desde enero y a las navieras les preocupaba que Argentina iniciara el cobro compulsivo y la retención de convoyes.
En ese contexto Paraguay accedería a pagar una tarifa menor a los 1,47 dólares impuestos el año pasado por el gobierno argentino.
Las empresas navieras paraguayas finalmente accedieron a pagar una tarifa intermedia a la Administración General de Puertos (AGP) para que los convoyes puedan circular en el tramo Santa Fe-Confluencia de la hidrovía sin mayores inconvenientes.
Esta postura contrasta con la expresada previamente por Raúl Valdez, presidente del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay, quien rechazó cualquier tarifa impuesta por Argentina. Ramírez también insistió en la necesidad de un consenso entre todos los países firmantes del Tratado de Hidrovías para definir los requisitos de recaudación por parte de Argentina.
La posición paraguaya cambió después de la reunión mantenida en Buenos Aires con las autoridades de la Administración General de Puertos Argentina el pasado miércoles.
En esta reunión, la delegación paraguaya accedió a pagar una tarifa menor a los 1,47 dólares actuales, aunque todavía no se fijó el nuevo monto. Por su parte, Argentina se comprometió a no retener las embarcaciones con bandera de ninguno de los miembros del Comité Intergubernamental de la Hidrovía -Paraguay, Brasil, Uruguay y Bolivia- ni a impulsar el cobro compulsivo de facturas impagas que se generaron desde el mes de enero hasta la fecha.
Julio Vera, titular de la Administración Nacional de Navegación y Puertos aseguró que la negociación se centró en el reclamo de las navieras que deben un monto considerable de dinero a la AGP. El monto de la tarifa intermedia consistirá un precio menor a los 1,47 dólares por tonelada impuesta por medio de la resoluciones 625/2022 y 1023/2022 del Ministerio de Transporte argentino.
En esta reunión, se recordó que según el artículo 8 del Tratado de la Hidrovía del Paraná, los países pueden cobrar peajes siempre y cuando se proporcionen servicios específicos y todos los países miembros estén de acuerdo. La reunión en Buenos Aires se centró en dos aspectos: el monto del peaje que Argentina pretende cobrar y la justificación de estos honorarios.
Finalmente, el canciller, Rubén Ramírez Lezcano, recordó que la Argentina mantiene una deuda con Paraguay por el consumo de electricidad en Yacyretá, que durante el gobierno de Alberto Fernández, Paraguay le ofreció pagarla en cuotas esperando una respuesta de Buenos Aires.